El Congresista estadounidense George E. Brown Jr. jugó un papel clave en la conformación y consolidación de FUMEC. Siendo presidente del Comité de Ciencia y Tecnología de la Cámara de Representantes de los Estados Unidos, Brown defendió la necesidad de fortalecer el intercambio binacional en estas áreas y realizó gestiones en los Estados Unidos que permitieron movilizar los primeros recursos para FUMEC, ligados a la Ley de Cooperación Científica Interamericana (H.R. 3215).
A partir de la conformación de la organización en Estados Unidos, fue posible que el Congresista Brown buscara la primera aportación al patrimonio de la Fundación, que tuvo lugar en el marco de las negociaciones del Tratado de Libre Comercio. El día 17 de marzo de 1992, el congresista Brown abrió la sesión del Congreso con estas palabras:
“En primer lugar, debo enfatizar que el futuro económico de los Estados Unidos depende en gran medida de la capacidad de las naciones latinoamericanas para crecer económicamente… Todos estamos de acuerdo en que este crecimiento económico depende significativamente del desarrollo de una infraestructura científica y tecnológica vigorosa... El crecimiento económico es clave no solo para aprovechar los beneficios de las relaciones comerciales cada vez más abiertas en el hemisferio occidental, sino también para mantener la estabilidad política”.
Dos actores importantes para la conformación de FUMEC fueron los asesores científicos de los presidentes de ambos países, Guillermo Soberón Acevedo en México y Alan Bromley en los Estados Unidos, quienes se encargaron de organizar grupos de trabajo y asegurar que existiera un compromiso por parte de los dos gobiernos para crear la Fundación, la cual opera a partir de la conformación de dos organizaciones, la George E. Brown United States/ Mexico Foundation for Science Inc., 501c3 (1991) y la Fundación México Estados Unidos para Ciencia A.C. (1993) en México, que operan bajo la tutela de una sola Junta de Gobierno binacional.
De 1992 a 1996, FUMEC operó un fondo aportado por los Estados Unidos que permitió impulsar programas de becas e intercambios de científicos.
Finalmente, en 1997, el Congresista Brown trabajando con las autoridades de los dos países y con científicos destacados de las Academias de Ciencia de Estados Unidos y México, como Salomón Bartnicki-García, Arturo Gómez-Pompa, Fausto Alzati, Guillermo Soberón, M. Wallerstein, Hugo Aréchiga y Bruce Babbit, logró que se estableciera un fondo de apoyo patrimonial para FUMEC, con aportaciones de los dos países, que ha sido clave para darle una base operativa a la Fundación.
Al respecto, Guillermo Fernández de la Garza, quien dirigió FUMEC por 23 años, expresó que para él lo más importante del Congresista Brown fue la visión integral de lo que significa la ciencia y la tecnología para el desarrollo de los países.
“Siempre supo que el éxito de un país depende de que realmente pueda aprovechar bien su capacidad de asimilar y de desarrollar conocimientos”.
Para Fernández de la Garza, el desarrollo de la ciencia y de la tecnología genera un río muy caudaloso de cambios que se presentan en forma continua. “Ese entorno de estar generando conocimientos nuevos es clave porque te saca del conformismo, tu entorno está cambiando, tus oportunidades están cambiando, tus amenazas están cambiando, entonces tienes que estar atento”.